lunes, mayo 26, 2008

Dragon Force

¿Has escuchado Power metal?

Hace un rato que escuché a un grupo que me llamó poderosamente la atención, su nombre: DRAGONFORCE.

Formada en el año de 1999 a partir de los remanentes de una banda de Black Metal llamada Demoniac y de otras agrupaciones, tomaron en un principio el nombre de Dragon Heart, que tuvieron que cambiar debido a la existencia de una banda brasileña con el mismo nombre, que también tocaban Black Metal.

Bajo el nombre de Dragon Heart sólo sacaron un demo llamado Valley of the Damned, que un tiempo después y ya con el nombre de Dragon Force sacaron como disco completo.

Esta canción es una muestra del virtuosismo que se puede lograr con horas y horas de práctica.

Damas y caballeros, con ustedes Dragon Force.

Te amo

Te amo, porque me basta el día si tu mirada se encuentra con la mía.

Te amo, porque en silencio las noches se dedican a tu presencia, a tu nombre.

Te amo, porque en el caos, eres oasis, eres tranquilidad, eres simplemente tú.

Te amo, porque has hecho en mí, sin quererlo, lo que nadie nunca ha logrado.

Te amo, porque representas la alegría de mis días.

Te amo, porque veo en ti la posibilidad de lograr, juntos, todos nuestros anhelos.

Te amo, porque al verte, se pulverizan todas mis dudas y mis miedos.

Te amo, porque sin saberlo, te has convertido en una parte indeleble de mi ser.

domingo, mayo 25, 2008

Como quisiera

Como quisiera poder expresar en pocas palabras lo que me detiene en este espacio, en un limbo que ya no existe.

Como quisiera poder llevarte sin que lo notes a una nueva manera de visualizar la vida, a estremecerte con un atardecer.

Como quisiera que vieras el nacimiento de una lágrima, que desde mi corazón viaja hasta tu ternura.

Como quisiera que me dejaras refugiarme un minuto en ti y que tú lo hicieras en mí.

Como quisiera meterme en tu respiración y que entre suspiros vivieras lo que mi corazón late a cada momento.

Como quisiera sorprenderte con mil besos, que como pétalos se desprendan y vuelen hacía lo más profundo de tu ser.

Como quisiera remontarme en sentimientos tan antiguos que vivieran de nuevo en una historia compartida entre los dos.

Como quisiera entretenerme en vivir cada segundo con los pensamientos entrelazados y transformarlos en un cómplice complemento, único e irrepetible.

Como quisiera que tus sueños fuesen continuación de los míos.

Como quisiera ser una historia y que tú fueras la protagonista.

Como quisiera…

martes, mayo 20, 2008

Robo de auto

Hoy en la madrugada me robaron mi carro.

Contrario a lo que pudiera sentir, mi tranquilidad no se desvaneció al percatarme del hecho. Me dormí como a la una de la mañana y eran alrededor de las cinco pasadas de la mañana cuando ví que no estaba donde lo había estacionado. Antes de llamar a la policía y denunciar el hecho, me bañé y después llamé. La serenidad me acompañó todo el día en una reunión que tuve por la mañana y posteriormente al hacer el trámite de reporte ante las autoridades correspondientes. Todos me decían que no entendían porque estaba tan tranquilo, para mí no representaba nada más que el hecho de que mi carro ya no estaba donde lo dejé.

No sé si lo voy a recuperar, no sé si estará ya desmantelado, no sé si aún exista como una unidad motriz, ni siquiera sé que esperar. No tengo enemigos, quizás dos o tres personas sientan gusto por la noticia, pero no les creo capaz de obrar de esta forma para vengarse de mí. No me creo tan malo, ni tan importante.

Me han dicho: Debes de estar enojado o agüitado, nada de eso. Lo que siento en este momento es un poco de cansancio, de incertidumbre. Es en realidad un reto para resolver a la brevedad. Las cosas pasan por algo y esto pasó porque tenía que pasar. Así funciona el universo, así funciona la divinidad. No debo de cuestionarme, he aprendido que las cosas sirven a una causa y su efecto.

Por ello, dejaremos pasar el tiempo y que las cosas pasen como deben de pasar.

Gracias a todos por su preocupación y apoyo. Les abrazo enormemente.


P.D. Se detuvo la continuación del cuento LA CARTA, espero en la semana publicarlo completo. Gracias por sus comentarios.

miércoles, mayo 14, 2008

La carta (tercera parte)

VIII

Fue justo después de mi descubrimiento que empecé mi plan de escape, primeramente, tracé la estrategia, tenía que ser perfecto, que mi padre autorizará sin saber que me iría para no continuar con el teatro social que mi familia tenía montado desde que recordaba. Mi primera opción fue viajar al extranjero donde no pudieran monitorearme, pero inmediatamente lo descarté pensando en que me enviarían con alguien como niñera, para no perder el control sobre mí, tenía que pensar en el escape perfecto. Entonces recordé a mi tío en Los Ángeles, él era una opción viable, ya se había comentado en sus visitas, que el me recibía encantado de la vida en su casa. Viudo sin hijos, siempre me vio como una posibilidad de continuar, de alguna forma, su legado. Mi tío Eduardo, hermano de mi padre, era el reverso de la moneda, con su modo desenfadado, vivía en un mundo de relax, de fiestas, pero no eran socialmente aceptadas, aunque su discreción era impecable, sabía que en lo privado era un verdadero parrandero. Lo importante era que mis padres no conocían esta conducta y lo tenían como el hijo travieso y aventurero, con pequeños negocios que lo mantenían entretenido en la vida. Mi plan tomaba forma y me encantaba la idea. Ni en mis más locos sueños me hubiera imaginado que el destino me tenía reservadas varias sorpresas con mi decisión.

IX

Leía cada palabra y no podía contener mi alegría, afuera el sonido infernal se escuchaba ya en segundo plano. Me sentí seguro, pero no podía cantar victoria. Habría que pensar en un plan de escape de la casa. La situación era sumamente difícil, encontrar la forma de recorrer el camino hacía la ciudad, se veía imposible, pero una fe renovada y la alegría que sentía con el contenido de la carta y lo que representaba me motivaba. La euforia me llevó a un estado de relajación que no deseaba. Era como si el cúmulo de emociones me hubiera anestesiado, sentía que me desvanecía, aún cuando debía mantenerme despierto y alerta, mi cuerpo me exigía mantenerme despierto. La oscuridad era total, la paz que sentía me lleno paulatinamente de un sueño lento y cada vez más profundo.

El alarido más espantoso que haya escuchado en mi vida, fue el que me sacó de mi sueño y me puso en alerta, estaba seguro que algo o alguien estaba junto a mí. En los primeros segundos, lo primero que hice fue asegurar la carta en mi bolsillo y tomar el bat, lo que fuera estaba dispuesto a pelear. Mis sentidos se agudizaron a tal grado que podía sentir cada parte de mi cuerpo, mi respiración fue pasando de acelerada a pausada, los latidos del corazón los sentía en mi frente, a pesar del frío, gruesas gotas de sudor surcaban por mi rostro. Jamás, que lo recuerde, estuve en alerta con tanta concentración, podía escuchar con suma claridad, el viento en el exterior, como movía las hojas del naranjo, también escuchaba la respiración de tres de esos seres que se movían en mi búsqueda, entonces me di cuenta, que si yo podía escucharles ellos también me escuchaban a mí. Entonces, de manera automática mi cuerpo se silenció.
Era tal el silencio que empecé a escuchar los latidos de mi corazón, el miedo absurdo de que pudieran ellos también escuchar mis latidos, me llenó de un pavor indescifrable, volteaba a ver mi pecho y luego sentí como empezaron a mover la alfombra, sus uñas rasgaban la entrada. De pronto, el silencio se hizo grande, empezó a llenar todos los rincones, era tal que empecé a dudar de mi capacidad auditiva, no se escuchaba nada en lo absoluto, fueron segundos que se convirtieron en minutos, ahora ni las hojas moverse al viento era posible escuchar. Lo que pasó a continuación fue simplemente el caos. Disparos, pasos, aullidos, bramidos, ruido de pelea, por una pequeña hendija de la puerta que me protegía, se filtraba una luz intermitente, que se movía en todas direcciones, escuche voces y supe que mi fin estaba cerca. Una voz gritaba fuertemente que me había encontrado y solicitaba que le ayudarán a mover la puerta, por sus pasos supe que eran 3 hombres.

En ese momento, antes de abrir la puerta, escuché claramente como cortaba cartucho, conocía ese sonido de las tantas tardes que acompañé a los hombres de mi familia a cazar. Era una escopeta recortada de doble cabina. Como la del abuelo. La puerta se abrió y yo blandía el bat dispuesto a no entregar mi vida tan fácilmente.

martes, mayo 13, 2008

La carta (segunda parte)

IV

De mi madre tengo los más gratos recuerdos, ella fue la que me enseñó la importancia de saber diferenciar entre las personas, encontrar la belleza en las cosas y en la gente, el bien, el mal y como sacar el mayor provecho al tiempo. Con ella descubrí el arte, la pasión por vivir, el despertar constantemente mi capacidad de asombro y el trabajo como una virtud, cosa curiosa, porque nunca en mi vida pude ver a alguien de la familia trabajar en algo, jamás.

Creo que mi madre nunca supo que fue ella la que con sus enseñanzas me alejó de toda esta farsa que representaba la sociedad y que ella quería que yo amara, ella fue la que me empujó a buscar más allá. Y esa búsqueda me llevaría irremediablemente al sitio donde me encuentro hoy. No me arrepiento, nunca lo haría.

V

Escucho acercarse al grupo que viene por mí, rápidamente seco mi rostro y soy conciente de que no hay tiempo que perder, analizo rápidamente si hay algo en este cuarto que me pueda servir, encuentro un viejo bat de aluminio con el que solía jugar de niño que luego paso a ser parte de los juguetes que nunca usamos mi hijo y yo.

Bajo y encontrarme con el cuerpo sin vida y desangrado de quien fuera mi guarda, me confunde de nuevo. No hay tiempo para confusiones, busco en el armario mi vieja arma y no la encuentro, creo que ellos ya la encontraron antes. Debo encontrar un escondite para pasar la noche, eso es lo primero, mi búsqueda no durará mucho esta tarde, apenas y unos minutos más y la noche no permitirá continuarla. Hay más peligros que aguardan la oscuridad para salir en busca de nosotros.

VI

Recuerdo la primera pelea, o mejor dicho, la primera vez que me revele ante una orden terminante de mi madre. Ella jamás peleaba, ni siquiera podía discutir nada, era absoluta, como lo son casi todas las madres. Sin embargo en esa mi primera juventud, estaba convencido que ella estaba equivocada y la razón estaba en esa ocasión conmigo, lo que más me intrigó fue su postura de darse media vuelta y alcanzar a escucharle murmurar, necio. En ese instante supe que mi vida ya no sería nunca igual. Algo se rompió, quizás fue el famoso cordón umbilical que continuaba aferrándome a ella. No fue un proceso doloroso, por lo menos no para mí. Era libre y por ello me era permitido, por mí, hacer lo que quisiera. Fue la primera vez que fui yo verdaderamente, fue, por así decirlo mi graduación de la vida. Todo era posible, nadie iba a detener mi aventura, la aventura de la vida, tenía 16 años.

VII

Con el bat de baseball en mis manos, empuñándolo como si mi vida dependiera de la fuerza con la que lo sujetara, salí de la casa, baje las escaleras y me dirigí al jardín posterior, perdiéndose en la oscuridad, el naranjo se silueteaba con los últimos rayos del sol. Detrás del naranjo encontré una vieja alfombra que cubría una entrada al sótano que años atrás construí, antes de mudarme a la casa, era un cuarto de cuatro por tres metros, donde tenía una mesa y algunos comestibles que de vez en cuando compartía con mi esposa, que era la única que sabía de la existencia de este escondite secreto, donde tantas noches me extasiaba con la ternura de sus caricias y la fogosidad de su ser. Las cosas cambiaron cuando nació nuestro primer hijo, cambiaron mucho, era una nueva felicidad, así lo entendí y así lo acepté. Nuestra vida era perfecta, demasiado increíble, pero lo era.

Un ruido cercano me obligo a poner en alerta todos mis sentidos. Estaba seguro que el viejo pedazo de alfombra pasaría completamente desapercibido para mis perseguidores. Sin embargo todo podía pasar, el ruido de sus voces era tan fuerte que estaba seguro estaban exactamente arriba de mí. Los escuché vacilar, le quedaban como 2 minutos para tener que irse a refugiar. Escucharlos alejarse me tranquilizó sobremanera, pero al escuchar ese sonido penetrar mis oídos, un escalofrío se apoderó de todo mi cuerpo, la tensión me mantuvo inmóvil durante varios minutos, el infierno había abierto sus puertas y los demonios estaban libres y lo que era mucho peor que eso. Estaban hambrientos. Busqué la carta y sin hacer el menor ruido, la abrí y leí su contenido.

lunes, mayo 12, 2008

La carta (Primera parte)

I
.
Pequeñas partículas de polvo cubren en una sucesión de increíble precisión la portada del libro que dejé en el escritorio, de esto hace ya más de un año. El regresar a este lugar, después de huir tan abruptamente, me hace sentir el más mísero de todos los cobardes, abandonarte así, fue un acto por demás egoísta. Sin embargo, ¿Qué más podía hacer? Mis alternativas estaban completamente limitadas en ese momento. Hoy todo es completamente diferente, han pasado tantas cosas en tan corto tiempo. Afuera me esperan, me han dado sólo cinco minutos, he perdido demasiado en recordar, pero, no podía haber sido de otra forma, el aroma de este lugar me sigue regresando en el pasado, debo encontrarlo.
.
Busco afanosamente en los cajones, en los estantes, mi memoria me traiciona, pensé que estaría en el cajón con mis cosas, pero ahí no hay más que papeles y recuerdos de otros tiempos. La misma desesperación me hace titubear, sé que me queda menos de un minuto, escucho la impaciencia de mis guardianes y sé que en cualquier momento me llevarán y nunca más volveré a este, que tan sólo doce meses atrás era mi hogar. Cuantos recuerdos llegan de golpe que inundan mis ojos de lágrimas. Ahora busco con desesperación, empiezo a tirar y golpear, no la encuentro por ningún lado. De pronto, se abre la puerta y al voltear veo la risa burlona pintada en la cara de uno de ellos, sólo me hace una seña de que el tiempo se ha acabado. Le pido que me deje un sólo minuto, solo eso. El ríe a carcajadas y se acerca a mí, esa cara, esa maldita cara, me hace enfurecer, pero mi rostro no demuestra mi ira. Simplemente, estampo mi puño en su rostro, el me mira con esa mirada incrédula de quien jamás espero una sorpresa. Cae al suelo y solo atino a tirarme sobre él y golpearlo repetidamente en el rostro, tomo una de las lámparas y con el peso cae sobre su cabeza, el ruido que hace es espantoso, como quebrar un ladrillo en el piso de un golpe. La sangre me llena el rostro y mi ropa, me quedo congelado por segundos, pero tengo que reaccionar.
.
Debo escapar, abro la ventana. En ese momento escucho el ruido de la puerta y me imagino su estupor al ver a su hermano tirado, muerto. La sangre le empieza a hervir, el odio hacia mí es muy superior a sus órdenes, escucho claramente como corta cartucho y se dispone a matarme. Aun sabiendo lo valiosa que es mi vida, a él no le importa, sólo quiere venganza. Entra a la recámara y ve la ventana abierta, con una maldición, sale de la casa, rumbo a los callejones, al mismo tiempo que al teléfono, habla con sus jefes para decirles que he escapado. Todo esto lo escucho escondido en el armario, ya que nunca salí de la casa. Tengo que encontrar lo que me ha convertido en un asesino.
.
Salgo lentamente del armario y la poca luz que entra hace ahora más tétrico el lugar, avanzo lento, pero muy seguro. Algo cambió en mi en los últimos minutos, algo que difícilmente puedo explicar, me siento otro, un ser nuevo, liberado, aunque sé que en cualquier momento vendrán por mí, estoy listo para enfrentarlos, el miedo desapareció, se disolvió con la sangre de la vida que arrebaté. Era un maldito bastardo, se lo merecía, aunque nunca, ni en mis más alocados sueños me sentí capaz de dañar a nadie, mucho menos quitarle la vida. Ahora esa sensación de jugar a ser una especie de dios, me enardecía. Al igual que su hermano, también quería venganza.
.
II
.
El llamarme Guillermo Escárgeca III, como el abuelo, me llenaba de una satisfacción pueril, nunca hubiese sido más fácil vivir que en este tiempo. A mis padres les tocó la época dorada de la empresa de mis abuelos, ahora un corporativo había quitado la dirección de la empresa a la familia, pero en su lugar ahora tenían una cuantiosa fortuna en acciones, ahorros, inversiones y propiedades alrededor del mundo, que nos permitía vivir con todas las comodidades y lujos, convirtiéndonos, en uno de los apellidos más renombrados de la sociedad. A mí, sinceramente me daba risa, ese enfoque social que siempre tenía la vida para mis padres, pero sobre todo para mi madre y mi abuela, que siempre vivían pensando en lo que los demás decían, creo que su vida estaba pensada, minuto a minuto en satisfacer a los demás. Qué banal.
.
Ahora entiendo algunas cosas que antes jamás me hubiera creído. En una familia normal, las cosas hubieran sido diferentes, pero es que mi padre siempre fue un extraño, recuerdo claramente que nadie hablaba directamente con él. Si alguien quería acercarse, tenía que hablar con mi madre, que hasta donde recuerdo, en lo que respecta a mí, sólo dos veces me permitió hablar con él. La primera es relevante, porque quería saber cual era el origen de Dios y mi padre me dejó claro que la divinidad era tan sólo un invento de la gente que controla el mundo desde el principio de los tiempos, para tener a la gente, atada a una creencia. Que Dios y la religión eran para los pobres y débiles. Ahí entendí que sus constantes visitas a misa y festividades de la iglesia, eran sólo para guardar una apariencia ante la siempre curiosa sociedad. La segunda era sobre el origen de la vida y el me sonrío y me dijo, ya eres todo un hombre, dandome una palmada en la espalda, es lo más cercano a una caricia de mi padre, tenía diez años.
.
III
.
Venganza por todo el pasado, por este último año, viviendo peor que las ratas, escondido siempre, agazapado, comiendo yerbas y bichos para poder sobrevivir, después cuando fue rescatado, hubiera preferido mil veces seguir escondido, fue víctima de tantas bajezas indescriptibles, era el precio de seguir viviendo. Ahora todo estaba decidido, vengaría con sangre toda la sangre de su familia, de su amada esposa y la de su hija. Tenía que encontrar el paquete, ese que haría cambiar para siempre el destino de la vida. Debía apresurarse, sus captores vendrían como perros embravecidos por la sangre de su hermano. Escuchaba, a lo lejos, disparos que pretendían matarle. Aún tenía saldo a su favor. No todos le querían muerto, su vida, él sabía que valía más de lo que suponían, pero debía encontrar la clave de todo. De repente, la luz. Al voltear al cielo, lo recordó todo, con desesperación subió la escalera hacía el cuarto de su hijo, donde arriba de su litera, había una especie de pared falsa, juntos lo planearon, era el espacio ideal para guardar secretos. Los recuerdos llegaban de golpe, uno tras otro, las risas de su hijo y de su esposa, llenaron ensordecedoramente la habitación, recordaba claramente la felicidad que vivió en ese espacio. Al abrir ese espacio sagrado para él y su hijo, el desorden de las cosas que su hijo y él mismo atesoraban lo inmovilizó, pero en la oscuridad, ahí estaba la carta, al verla abierta titubeo, fue una descarga de energía y sus esperanzas se evaporaron, el desánimo fue abrumador, la tomo en sus manos temblorosas, pero dentro del sobre, su secreto, nadie reparó en él, las lágrimas inundaron inevitablemente su rostro. Ahí radicaba su salvación y la de los suyos. Ahora lo único que quedaba era llevar esa carta a la ciudad, eran poco más de quince kilómetros, tendría que enfrentar cientos de peligros, pero el mayor de ellos se acercaba demasiado rápido, era la oscuridad de la noche...

Retos

Todos los retos que se han acumulado para esta semana se multiplicaron exponencialmente.
.
Afortunadamente esto está pasando sin buscarlo, aunque no es necesariamente magia, es el resultado del tiempo en que hemos trabajado para llegar a esto. Actuaremos en consecuencia.
.
¡A trabajar!

domingo, mayo 11, 2008

El tiempo


Se acaba el tiempo... me escuché decir...

.

Creo que es lo más erróneo que he dicho en mi vida, aún si lo aplicara como termino de un lapso para concretar un objetivo, el tiempo es tan relativo y también entonces tan inagotable, que siempre hay la oportunidad de "hacer" más tiempo. Pero si no se puede acabar, ¿Cómo es posible que quiera hacerlo?

.

El tiempo es simplemente una unidad para medir el paso de los días, para poder ordenar nuestras actividades, para poder espacio para cada acción en nuestra vida. Tiempo para trabajar, para descansar, para dormir, tiempo libre, para compartir. Si efectivamente lo utilizáramos para lo que fue creado, realmente tendríamos un poco más de orden en nuestras vidas.

.

Les propongo algo, dividan su día en una hoja, escriban cuanto tiempo del día dedican al trabajo, cuando a comer, cuanto a dormir, cuanto a prepararse para las diversas actividades, cuanto tiempo le dedicamos a la familia, a nosotros mismos, cuanto del día es para los amigos, etc. Cuando terminen este ejercicio, no se estresen, seguramente les saldrá un día de 50 horas, recuerden que con orden, podemos destinar un poco de nuestro tiempo a la semana o incluso al mes, para lo que consideremos importante. También podemos hacer en base a esta lista, una donde se de prioridad, acorde a nuestra visión de vida. Les garantizo que tendrán una mejor idea de lo que pueden hacer con el tiempo. A mi me pasó y hace mucho que no me detenía a pensar que el tiempo es como el espacio y que en su inmensidad nos podemos fácilmente perder.

.

Recuerda que nosotros inventamos el tiempo como control, no para que él nos controlará a nosotros.

.

Feliz inicio de semana y a aprovechar el tiempo...

Sol y luna en domingo

La tarde lentamente se convertía en una ausencia de luz, el sol ya no estaba en el horizonte, pero se negaba a ocultarse definitivamente. La luna brillaba tenue, casi sin querer, hizo su aparición, discreta por el oriente, llena, plena, pero el sol insistía en minimizarla. En este punto volteando hacía ambos lados, podía maravillarme con el sol perdiendose con sus últimos rayos de luz o en el sentido contrario con la luna que cada segundo tomaba un poco de esos rayos del sol y como un enorme y plateado espejo se aprovechaba para enviarnos esa luz que se negaba a morir.
La noche llegaba, inminente, poderosa, pero no contaba con la luna, quien desde su trinchera, insistía en iluminar mi pensamiento, que en este momento de mi día, o quizás hasta de mi vida, divagaba en la magia que representa el vivir en este tiempo y en este lugar. Las coincidencias son algo intangible e incluso pensé que no existían en mí, que las causas eran las que determinaban los acontecimientos. Debatir conmigo mismo sobre esto, es algo como filosofar sobre la existencia de Dios. Hay que creer, hay que confiar más seguido en nuestras sensaciones, en lo que vibra, en lo que sentimos en nuestro estómago, en nuestras entrañas, en el punto más luminoso de nuestro cuerpo, donde se concentran todas las emociones palpables. Cierro mis ojos y sé que la luna va ganando terreno, así como tengo certeza de que en unos minutos el sol ya no estará visible, pero que mañana irremediablemente saldrá de nuevo el sol, dando la pauta para un nuevo día, aun cuando yo duerma o más aun cuando no existiera, esto ocurrirá.
Con mis ojos cerrados, visualizo un poco más hacía el poniente y puedo ver el mar con un sol apenas empezando su crepúsculo, lentamente, me tiendo en mi lugar simplemente a observar este espectáculo, no hay una simbiosis real entre mi psique y el hecho de poder maravillarme con este escenario. Es simplemente poder apreciar las diversas tonalidades que el cielo, en complicidad con algunas nubes y los rayos de luz, formando un gran cuadro, como una increíble e irrepetible obra de arte, que admiro, hipnotizado, agradecido. La paz que tengo en mí, es absoluta. Agradezco la oportunidad de sentir y ser partícipe de esto y lentamente me abandono a mi estado anterior, abro mis ojos y la noche aún no es del todo. Faltan escasos minutos, pero la luna sigue su triunfal camino hacia la luminosidad.
Sonrío y saciado mi espíritu, entro a mi casa y simplemente me preparo para emprender el reto de una nueva semana.

sábado, mayo 10, 2008

Dia de las madres

Escribir sobre las madres es algo que siempre se ha hecho, desde el principio de los tiempo donde el matriarcado era una forma común de asociación social y hasta nuestros días donde en muchos hogares la toma de decisiones recae en las madres.
Hablar poéticamente de ellas, es una práctica que nos lleva a miles de pensamientos donde se enaltece el hecho de ser madre, por lo que ellas representan para nosotros. Desde la prehistoria, nuestros antepasados daban una imagen de madre a los fenómenos de la naturaleza y esta nomenclatura ha perdurado hasta la fecha en la madre naturaleza. Por el hecho de su capacidad de dar vida. Si bien es cierto que el ser madre no conlleva una unilateralidad y requiere de la fecundación por su contraparte masculina, el desarrolar vida dentro de su vientre, las hace una especie de cápsula donde la magia de la vida es posible. En ese tiempo, la convivencia de la madre con el nuevo ser, se estrecha en un vínculo que nunca podremos experimentar como padres.
Es por ello, que al destinar un día para festejarlas es lo mínimo que podemos hacer para compensar todos los sacrificios que una madre hace por sus hijos. No hablo de regalos, ni de decir te quiero de forma automática, hablo de rendir un tributo real, un agradecimiento tangible que salga de nuestras entrañas, de nuestro ser. Porque no importa el status que guarde la relación madre-hijo, siempre podemos reconocer las acciones, pocas o muchas que una madre ha hecho por sus hijos. Es un día donde podemos perdonar, donde podemos reflexionar y lo reitero, ser agradecidos con ese ser humano que nos trajo dentro de ella, para darnos a la luz de la vida, y que durante el tiempo que hemos vivido, ha formado y forjado en nosotros una parte importante de nuestra personalidad y de lo que somos ante la sociedad y ante nosotros mismos.
El día de hoy, abrazo primeramente a mi madre, por todo lo que hemos vivido, por toda su sabiduría, por todos los besos y abrazos en los momentos clave de mi vida. Y por ser una nueva madre para mi hija, en su papel de abuela.
A mi hermana que está aprendiendo a ser madre.
A mis tías, que han formado a hombres y mujeres honestos y algunas con niños que pronto serán, estos seguro, un orgullo para toda la familia y no conformes con eso, ahora siguen esta labor con los nietos.
A mis primas, que por ser de mi generación, se han encontrado con una niñez más avispada y dinámica y que han dejado noches y días de desvelos y preocupaciones por sus hijos.
A mis amigas, que ya son madres y que llenan de amor a sus hijos, aunque a veces, lloren y se desesperen por la labor tan ardúa que les ha representado ser mamás.
A las mamás que han tenido la necesidad de ser padres y madres y que eso las ha fortalecido, que han dejado un poco de lado su vida, para enfocarse a sus hijos, va para ellas un reconocimiento especial y mi admiración, pronto se verá la recompensa.
A las madres que les ha tocado aparte de ser madres, esposas, profesionistas y que han tenido que sacar energía y hacer del tiempo un aliado para ser siempre y estar. Es increíble lo que puede hacer el ser humano cuando tiene el amor y la pasión suficiente para alcanzar las metas que se traza. El ser madres las ha llevado a creer que es posible y lo demuestran día a día.
A las madres que no son comprendidas en su labor, que los hijos han sido víctimas de la sociedad consumista o que por alguna circunstancia tengan que caer en el juego de darles todo, para compensar el tiempo que no pueden estar con ellos, a ellas, les deseo toda la luz para que encuentren la guía que les devuelva la tranquilidad y haga de sus hijos, seres concientes de que la vida es mucho más que lo material.
A las madres que han tenido que separarse de sus hijos y que el dolor de las cirunstancias las hace vivir atormentadas, a ellas les envio un abrazo especial, el lazo que existe entre ustedes y sus hijos es el más fuerte que existe, algún día, podrán compensar las ausencias, de algún modo, al fin de cuentas a una madre le perdonas todo.
A las mamás que han abandonado a sus hijos o los han dejado partir, a ellas va mi perdón, porque en su vida llevan la penitencia y el dolor de haber hecho algo que las separó para siempre de una parte de ellas.
A las madres de México que hacen que nuestro país aguante crisis y toda la violencia y problemática de un país tan complejo como el nuestro y ellas son el sostén de la familia y no hablo de dinero, hablo de lo que son capaces de hacer para mantener la unión entre la familia, conciliando, resolviendo, simplemente amando.
Feliz día de las Madres. Que mi Dios las siga llenando de bendiciones.

viernes, mayo 09, 2008

Fin de semana diferente

Hoy fue un día diferente... una mañana inusual, carreras, cansancio, rayando el agotamiento, apenas alcancé a llegar por mi hija al colegio, de hecho llegué 7 minutos tarde, cuando siempre, siempre llegó minutos antes de su salida. Comimos rico con mi mamá, afinando detalles para mañana y como siempre, nada quedó definido. Platiqué de mil cosas y de nada con mi madre y vi que era hora de ir al banco a cobrar un cheque. Hacer una fila inmensa y sorpresa... no tenía fondos suficientes, curiosamente ayer deposité un cheque de otro banco y no aparece. Le pedí a mi amigo Enrique que revisará y no aparece. Por lo pronto se cobraron lo del cheque botado, no tengo liquidez para los compromisos inmediatos del fin de semana, hasta el lunes. A veces, la modernidad nos cobra un precio demasiado alto, precisamente en la búsqueda de la comodidad y la seguridad de nuestra liquidez. Antes hubiese sido más sencillo hacer el trabajo, cobrar al final y que te paguen por ello. Qué simple podría ser la economía y hasta me atrevo a decir que sería más efectiva, en cuanto a recaudación, percepción del pueblo de la administración pública, desarrollo de nuevas empresas, en fin, un mar de cosas que harían de nuestra vida, más satisfactoria. Pero bueno, vivimos bajo un esquema, donde la figura bancaria es una necesidad, mejor dicho una imposición que no podemos eliminar si queremos estar dentro de la ley y con la conciencia cívica completamente limpia.
En lo personal, todos los planes se vinieron abajo, la gente reclama, con justa razón. La verdad, en este preciso momento de mi vida, lo único que quiero es cerrar mis ojos y relajarme, pero curiosamente no puedo, mi responsabilidad y mi búsqueda de las cosas me obliga a dirigir mis pensamientos a encontrar soluciones a este enredo. El caos empieza con cosas simples, hacia ellas dirigiré mis pensamientos vespertinos y me enfocaré en librerar todas las vibras que me ayuden a enteder las soluciones que se encuntran en mi derredor.
Las cosas pasan por algo, aunque ya me hacía en la playa, con el sonido del mar rodeándome y deleitándome voluptuosamente. Los coctéles tendrán que esperar a otros nuevos días donde las oportunidades se den de mejor manera.
Aunque siempre se me ocurre cada cosa... Ahí les platicaré próximamente. Para todos, difruten su fin de semana.

jueves, mayo 08, 2008

Lecciones de guitarra

Siempre he querido aprender a tocar la guitarra. Creo que las circunstancias no me lo han permitido, ya que las tres ocasiones que he entrado a talleres, las cosas nomás no se dan. Pero nunca es tarde y creo que después de ver este video, lo intentaré por cuarta ocasión. Disfruta de esta cancionzota y de esta lección.


miércoles, mayo 07, 2008

sonreír

Yo no quiero de ninguna forma entender todo,
ni siquiera pretendo que las cosas sea claras,
no me interesa pero para nada las confusiones,
estoy tan ausente de todo el caos en el mundo,
que sólo me alcanza el día para sonreír...

martes, mayo 06, 2008

Sonorense vacunado

Hoy por la mañana tocaron a mi puerta, era una muchacha muy guapa y un muchacho, ambos traían batas de enfermeros y la clasica hielerita. Inmediatamente se identificaron y me dijeron que andaban en la campaña de vacunación contra el sarampión y rubéola, que dicha vacuna era indiscriminada (o sea que a todo mundo se la ponían) y que si podían aplicarmela.

Con todo el pavor que tengo hacia las agujas, no podía negarme ante la belleza de esta enfermera ni de los argumentos emitidos, así que les invité a pasar a mi casa y rápidamente ya estaban preparando la jeriga con una agujota. El muchacho se sonrío y me dijo desvistete, me le quedé viendo con cara de ¿Perdón?, en realidad me pidió que descubriera mi brazo izquierdo. Me quité mi camisa (afortunadamente traía una camisa sin mangas debajo, sino, imagínense el impacto de mi abdomen fuertemente trabajando en el gimnasio les hubiera distraído, sobre todo a la enfermera bonita), no bien había quitado mi camisa, ya estaba este enfermero insertando la aguja, debo confesar que me dolio un poco, pero la enfermera con preciosos ojos negros me miraba fijamente y aparte me decía que no parecía de 37 sino que ella me calculó 29... pues creo que me enamoré. Ya en serio, les dije que les agradecía el andar en la campaña, ellos simplemente contestaron que estaban haciendo su trabajo.

Pues bien, hoy me convertí en un sonorense vacunado contra sarampión y rubéola, más vale, ¿No creen?

Y tú, ¿ya te vacunaste?

John Milton

Ayer me hipnotizó John Milton. Afortunadamente no caí en el hipnotismo total y digo afortunadamente porque vi el oso que hicieron los que subieron al escenario. Pero es increíble la sensación de no poderte mover y que su voz logre hacer que caigas cada vez más en ese estado cataléptico. Hoy me siento maravillosamente bien, hizo algunas programaciones en las mentes de los que entramos en ese "trance", todo es para bien.

Para los que no creen en el hipnotismo, es real.

Sino, pregúntenle a todos los que pasaron y dijeron e hicieron cosas que nunca en sus cinco sentidos harían. Es buen show el del señor John Milton. Lo recomiendo ampliamente.

lunes, mayo 05, 2008

Extraño...


Extraño el mar, extraño tanto su sonido,
extraño cuando tu reías a carcajadas,
cuando tu pelo se descomponía con el viento
y descuidada te peinabas, inútilmente.

Extraño tanto el mar y su horizonte
donde se enmarcaba tu cintura desafiante
y en la arena dejabas la silueta de tu cuerpo
instantanea, memorable, fugaz.
Extraño el mar y su oleaje, lento y estrepitoso
como tú, como tu risa, como tu ausencia...

domingo, mayo 04, 2008

El Principito

Hoy leí de nuevo El Principito de Antoine de Saint-Exupéry, me sustraje tanto en su lectura que me fusioné con ella, viví intensamente la vida del Principito, desde que está en su pequeño planeta, intentando que los árboles baobab no echen raíces, porque de así hacerlo destrozarían su mundo, así como mantener limpios los volcanes para que no hagan erupción y por supuesto el cuidado de su flor (mensaje ecológico para las nuevas generaciones).
Un día decide viajar a otros planetas (necesidad de búsqueda que es inherente al ser humano) y en su viaje encuentra otros planetas, habitados por adultos que le demuestran lo patético que podemos llegar a ser cuando crecemos. Su encuentro con el aviador, es de una belleza que conmueve, con una simpleza, el autor nos lleva de la mano en la coincidencia de dos seres que buscan diferentes cosas en la vida, en el tiempo, sin embargo el coincidir los lleva a compartir su vida y sus sentimientos.
Si todavía no has leído este cuento, que supuestamente es infantil, o hace mucho tiempo la leíste y no la recuerdas del todo, busca el libro y te garantizo un momento mágico.


Y si no tienes tiempo de ir a la librería o de conseguirlo y te apetece leerlo en línea, da click en este link y disfrutalo en tu computadora.

LEER EL PRINCIPITO

Este segmento de video, es el encuentro del Principito y El Zorro. (Nótese la urgencia de "domesticación" del zorro).

"Sólo con el corazón se puede ver con claridad, lo esencial es invisible a los ojos"


estabas cierta

Estabas cierta cuando dejaste morir al sol,
estabas cierta en no mirar de nuevo la luz,
estabas cierta en pensar tan solo en ti,
estabas cierta al dejar dormido al mar,
estabas cierta en tu escape sin más,
estabas cierta y lo sabías, dudando,
estabas cierta en cortar alas y no volar,
estabas cierta cuando ya no sonreías,
estabas cierta atrapando instantes,
estabas cierta, tan cierta que dolía,
estabas cierta cuando cerraste la puerta,
estabas cierta de tanta melancolía,
estabas cierta en todas las cosas,
estabas cierta de tanto pensarlo,
estabas cierta que era momento de ya no pensar.

Porque eres parte de los insomnios cautivos
que cada noche te arranca pedazos tuyos
porque la luz no quiere saber de ti, ni tú de ella
porque la luna se opaca junto a tu razón.

Estabas cierta, sí, pero ya que importa
si la ecuación no da nunca el resultado esperado.

Estabas cierta de tantas y tantas cosas,
que ahora que dudas... ahora que dudas...
Estas cierta de mí.

sábado, mayo 03, 2008

viernes, mayo 02, 2008

QUIERO DECIRTE HOY

Hoy quise escribirte estas líneas para decirte:

  • TE AMO
  • ERES LA RAZÓN QUE ME MUEVE
  • SONRÍO CON PENSARTE
  • SOY FELIZ POR TENERTE
  • AGRADEZCO A DIOS POR TI
  • ME ENCANTA TOMARTE DE LA MANO
  • ME MUERO CADA VEZ QUE ME ABRAZAS
  • Y QUE ES MARAVILLOSO CUANDO ME VES Y ME DICES QUE ME AMAS