miércoles, enero 04, 2017

Laberinto inhóspito

No me quiero retirar de los intentos. Nunca he sabido cómo hacerlo, cómo dejar atrás lo que siento sin complicar todos mis preceptos.Sí, es verdad que he fallado, pero ¿Quién no ha fallado antes? Sin buscar la justificación absurda de que a todos les pasa, es hoy diferente. Es algo tan diferente como buscar entendimiento desde dentro de mí. No es salir a buscar respuestas afuera, donde la confusión está más que revuelta, entre verdades incompletas y falsedades totales y que parecen ser ciertas, ya no sé distinguir. Y luego, para completar el cuadro, no he podido empatizar con tu sentir. Tus emociones de mujer me dejan en desventaja, una enorme desventaja que apenas y logro sobrepasar y me convierte en una especie de sobreviviente. Creo que me estoy desviando del origen primero de mis pensamientos, en mi negativa a dejar de lado cualquier posibilidad de lograr mis objetivos, sobre todo, los que tengo contigo, o mejor dicho, aquellos que he planeado sin planear y que he visualizado, malamente sin compartir, eso que he ya vivido en mis pensamientos donde somos protagonistas tu y yo, así, simplemente, nadie más. Solos. Te amo. He buscado tanto en mí para darte, que de pronto, me quedé sin la esencia de lo que soy en realidad. Hoy quiero amarte y encontrar la pequeña llave que me conceda la contraseña que abra de nuevo tus sentimientos y pueda leerte y descubrirte como aquel lejano enero que está tan cerca de mi memoria. Hoy sé que no debo de claudicar. Hoy es un día clave y nadie me detendrá, ni siquiera mis miedos, mi temor de que en verdad te pierda para siempre en el laberinto inhóspito de tu desamor.