jueves, abril 03, 2008

Yo estoy listo, ¿Y tú?

Conocer las diferentes formas de comunicación da como resultado el entendiemiento más efectivo entre las personas. Cada persona desarrolla diferentes formas de expresión, aunque en general, la mayoría utilicemos un lenguaje más universal, como lo es el lenguaje corporal. Sin embargo, cada una de las comunidades, regiones y países desarrollamos formas por demás peculiares en relación al resto de las entidades. Es de algún extraño modo la diferenciación cultural que busca la individualidad y a la par el formar parte de un grupo o sector social.

Viendo en más detalle, cada persona en una familia o en su contexto social, tiende a tener una personalidad que le diferencia del resto, pero a la vez, genera, usualmente, empatía con algunos de sus compañeros. Estas personas que tienen un sentido de pertenencia hacía alguna corriente "de moda" o una nueva forma de expresión, busca el reunirse y compartir un poco más de sus aficiones, gustos y formas de ver la vida.

Es en este contexto que aparecen grupos que por sus características particulares empiezan a cobrar notoriedad en la sociedad, quienes a pesar de ser una minoría, se dejan ver en grupos, lo que cobra particular vistosidad. Estos grupos, son vistos por la mayoría como segmentos de moda que siguen patrones que plantean los medios de comunicación, en su mayoría, o bien, tradiciones populares de la región (en nuestro caso sería la vestimenta vaquera). No podemos dejar por fuera las expresiones sociales que tienen su nacimiento en Europa, Asia o nuestra mayor influencia Estados Unidos, donde existen corrientes underground que siguen patrones muy estandarizados de tendencias que han ido evolucionando, casi siempre, se identifican con vestimenta, peinados, accesorios, tatuajes, pero sobre todo, toma estilos musicales que identifiquen a su grupo, ya sea por el ritmo o por las letras, o una combinación de ambas.

En este año, se ha susitado un hecho por demás lamentable. Hemos visto como la intolerancia ha alcanzado el límite de la violencia. Un llamado por la internet, corrió como reguero de polvora para atacar a uno de los grupos más incomprendidos de los últimos tiempos en nuestro país. Hablamos de los Emos. Esos muchachos que en la búsqueda de un lenguaje, de una personalidad, han encontrado en los peinados con flecos, pantalones ajustados y una conceptualización en desarrollo, el sitio para compartir con otros jóvenes que comparten, de algún modo sus mismos intereses.

Aquí lo que es importante recalcar es el hecho de quienes son, al parecer, los agresores de estos jóvenes... Los agresores, son otros grupos sociales, como los darketos, los metaleros y algunos más que se han unido, dando un mensaje de odio, intolerancia y sobre todo de ignorancia.

No debemos de pelear entre nosotros. Hay tanto por lo que pelear, hay tantas injusticias en nuestro país, para lo cual, debemos de unirnos todos, sin diferenciación, sin que mis gustos por vestir, por mi peinado o por mis aficiones musicales, puedan significar una agresión de un compatriota, simplemente porque no comparte los mismos gustos que yo.

Debemos de enfocar nuestra energía en ser propositivos, en entender que la única manera de sacar a nuestro país de esta míseria social que tenemos es con trabajo, unidos, encaminados hacía los mismos objetivos, señalando lo que no está bien y exigiendo de los políticos que hagan su trabajo sin excusas de ningún tipo. Sé que pensarán que estoy soñando, que esto es imposible. Pero mientras creamos que no es posible cambiar al país, seguiremos igual.

Los cambios empiezan por pequeñas cosas, en nosotros está el hacer que estas pequeñas cosas, estos pequeños cambios, ocurran.

Basta de pedir, es hora de ofrecer. ¿Qué puedo hacer hoy por tí, México?

Si tan sólo por un momento pensaramos y más importante, actuaramos pensando en nuestro país, estoy seguro que otro gallo nos cantara.

Por lo pronto, jóvenes, miremos al futuro ocupándonos de nuestras responsabilidades. El tiempo es hoy, no mañana, mucho menos ayer.

Yo estoy listo, ¿Y tú?

5 comentarios:

Sandra dijo...

Pues pues despuès de la clase de sociologìa que de allì pasò a civismo no lo sè aùn estoy pensando jejeje. Mi pensamiento es de has todas las cosas lo mejor que puedas de eso jamàs te arrepentiràs; y lo que estè en tus manos poder cambiar para mejor lo que no pues simplemente tendrè que aceptarlo y respetarlo.Hasta la vista :)

Venus dijo...

(L) Imaginate si no aceptará las diferencias... No le hablaría a mi hermanito, a mis primitos, a varios amigos y el listado sería interminable...

Estoy en desacuerdo con los "odios" inter raciales, sociales, políticos, culturales, de moda o de cualquier tipo... De hecho no apoyo ningún tipo de agresión hacia ningun ser viviente...

Cada día pongo mi granito de arena y sobre todo desde antes le enseño a mi nena valores (creo que este es un punto fundamental)...

Yo desde hace mucho tiempo estoy lista y encaminada...

¿Quién más esta list@?

Anónimo dijo...

Eteee...

Todo eso lo escribiste tu solo??

De ninguna manera acepto la violencia como medio de expresión y/o bajo ninguna circunstancia.

Sinembargo (un "PERO" elegante) debemos tomar en cuenta que todas las expresiones que nacen, crecen y reproducen, mueren o tienden a ubicarse en un segmento o sub grupo, o sea, una minoría.

Estas expresiones, cualquiera que analices, tienen una cultura, un modo de vida, que refleja comportamientos, pensamientos, actos y acciones que no siempre son sanas para una cultura ya establecida o dominante. Para una sociedad.

Es cuando debemos preguntarnos, ¿Qué tan sano es promover, dejarse influenciar o ser tolerantes por una cultura que lastima la integridad del ser humano? ¿Qué tan válido es ser permisivos o tolerantes con las culturas que vienen a "desculturizarnos"? ¿Debo permanecer inherte ante la desocialización del individuo en aras de "su expresión"?

Creo que entre más rechazemos PACIFICAMENTE las culturas que no son propositivas o que no aportan para la dignidad humana, estaremos estableciendo las bases para fortalecer una cultura donde la dignificación del ser humano sea el principal objetivo.

ALBERTOMORENO dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ALBERTOMORENO dijo...

Gracias por el comentario Ismael. Solamente acoto, ¿Quién decide que es sano para una "sociedad establecida", si esa sociedad establecida o dominante es o puede ser equívoca? Tendríamos que remitirnos a la ética, rama ésta de la filosofía que se encarga de clarificar que es lo bueno y lo malo. Sin embargo ("pero elegante"), dijo Napoleón, que todos pienses diferente a mi, no quiere decir que yo este equivocado.

El punto es, que debemos de ser, como dijo una amiga mia, "Intolerantes con la intolerancia". La intolerancia, no nos conduce a nada. Es como el miedo, que en voz de Yoda sería: "El miedo conduce al odio, el odio a la ira y la ira... al dolor". Debemos de no temer a aquellos que por sus preferencias musicales o de moda sean diferentes, quizás deberíamos de dejar de poner etiquetas a las personas, porque en realidad, el valor de cada una de ellas, está en su capacidad, su corazón, sus sentimientos, no en el antifaz, que quizás se lo puso, para acomodar su vida con la de sus similes. Sin otra búsqueda que la empatía.

Ahora bien, es importante el señalar que al igual que tu compadre, condeno la violencia en cualquiera de sus presentaciones, no hay forma de adornarla. La violencia genera violencia.

La invitación era a modificar un poco esa idea de que los grupos minoritarios son la escoria de la sociedad, porque tendriamos a un puñado de ñoños, otro puñado de intelectuales y algunos más (no sigo, porque dejo sentidos a dos, tres) que los condenaríamos a ser parte de una problemática que en realidad no existe como tal.

La invitación sigue en pie, para en vez de criticar, pelear, discutir, enemistarse, seamos propositivos y veamos por un bien común, veamos por un México más ordenado, más justo, con mejores condiciones de vida para todos (que político).

Quiero seguir orgulloso de ser mexicano, unos cuantos, no van a parar este tren en el cual, queramos o no, ya vamos encarrilados.

¡Viva México!