La fluidez de los pensamientos se aglomeran en un estrecho puente que desborda y se pierde en el sinsentido de lo banal.
El recorrido de ti en estos pensamientos es más que nada, una ausencia injustificada y llena de promesas rotas de un universo paralelo que se rompió hace tanto tiempo.
Resquebrajado me siento y me miro completo. No hay punto de unión que repare las fisuras invisibles que laceran mis sentidos y que hurtan mi aliento y mis sueños.
El día de hoy me atrevo a pensar más claramente en lo que no puedo cambiar. Desnudo cuerpo y alma y reviso mis heridas... sangro... El dolor se apodera de mi en segundos. Estoicamente me detengo y respiro pesadamente. Sé que es hora de enfrentarlo, sé lo que sigue y estoy preparado.
En una explosión de luz me libero de mi cuerpo, me libero de todo lo que estaba en mi pensamiento, dejo libre al cosmos el caos y el dolor cesa. Todo es quietud. La liberación se ha completado y ahora estoy renovado. Ahora estoy listo.
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