Pues si, ya es jueves o previernes, la gente anda alborotada, como cada inicio de fin de semana, el ánimo se vuelve inquieto, que curioso que la actitud de la gente cambia radicalmente, desde el miércoles se percibe hasta en el aire una vibra mejor. Los planes son muchos y muy variados, hay gente que se muere por ir a los antros, al billar, otros prefieren hacer reuniones más íntimas, poca gente en casa de alguien, de preferencia en la propia no, ya ven que siempre es un problema el ruido de la música y los infaltables escandalosos y por si esto fuera poco, el desorden y suciedad por TODA la casa, los hay también que sólo esperan el fin de semana para descansar de la rutina y litermente no hacen otra cosa que dormir y dormir.
Sin embargo, esta actitud de la gente tiene su lado bueno, ya que es posible encontrar una mayor disponibilidad en las oficinas de atención al público, en las tiendas y hasta en las oficinas donde uno pasa por el siempre díficl trámite de cobrar. Este es el caso que hoy me toco, muy temprano llegué a un banco y ¡oh sorpresa! No había nadie, en un minuto estaba desocupado y con efectivo en la bolsa (poco, pero algo es algo, digo suficiente para soportar el día y esperar que salga algo más sustancial para el día de mañana. De ahí fui a una oficina donde hay algunos pendientes de facturar y de trabajos inconclusos (por culpa de ellos, no hay orden, por mi no ha quedado) para ver si era posible ir facturando y que el trámite iniciara con miras a que salga el pago para finales del mes y nuevamente me sorprendió ver el ánimo y la camaradería que se respiraba en el lugar, la atención que me brindaron fue increíble y además inusitada en la historia del trato laboral que en los últimos dos años hemos mantenido. Ante mi estaba gente con la que he convivido muchas horas y que nunca habían sido así, entonces mi afán de buscar una razón a este enigma me llevó a cuestionarles si les habían aumentado el sueldo, si el jefe andaba de vacaciones o que pasaba, la respuesta fue la misma de cuatro de las diez personas que ahí laboran: No pasa nada, todo esta igualito igualito, así somos de lindos siempre, pero yo no me la creí. Analizando con detenimiento caí en cuenta que siempre los visitaba el día lunes o el martes, era como un hábito, y cuando los veía en otro día era porque había mucha presión por algún trabajo o evento.
Una vez pactados algunos convenios, cuando ya iba de salida de esa feliz oficina, uno de los jefes me abordó, inusitadamente como si fueramos grandes camaradas, me abrazó (hago un parentésis, para aclarar que mientras caminaba, el siguió caminando junto a mi y paso su mano sobre mi hombre en una actitud 100% masculina, NO sean malpensados) para hablarme casi casi en secreto de que el sábado iban a hacer una carne asada en su casa y que estaba cordialmente invitado... ¡Ahí estaba la confiramción a mi teoría! Definitivamente el fin de semana nos cambia y nos hace más felices... ¿Y Ustedes que plan tienen para este previernes?
Sólo un gran favor, sean prudentes, diviertanse, pero no se pasen de vivos, porque pasarse de vivos es pasar a la muerte... es una realidad, cuidense, quieranse y sean inmensamente felices!!!
Saludos
Ah, casí lo olvido, chequen este sitio, hay una cantidad incréible de videos y fotos, algunas son algo pesaditas (se recomienda discresión SOLO MAYORES DE EDAD), pero en general es educativo y de sano esparcimiento.
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