Piensa Lento, actúa rápido

Hace tiempo que he venido pensando en las cosas que nos pasan y que todo lo que sucede con ellas depende del tamaño que le demos. A veces una nimiedad la convertimos en un gigante y lo importante lo dejamos muchas ocasiones en el olvido, precisamente hasta que deja de serlo.

Hay un dicho nuevo, Piensa lento, actúa rápido. Cuantas cosas maravillosas pueden ocurrir si dedicamos un momento para pensar las cosas, cuantos embrollos evitaríamos con el simple hecho de pensar un poco en cada pequeño paso que damos en nuestro día. Además, hay otras ventajas como, el control que tendríamos sobre las consecuencias, el aprendizaje, nuestra percepción se vería agudizada, la memoria trabajaría de mejor manera y sobre todo el entendimiento de que nosotros somos los que elegimos y es nuestra responsabilidad y al final del día tendríamos la enorme satisfacción de haber atendido de manera personalísima nuestra vida.

Hagámoslo el día de hoy y veamos como los pequeños cambios se transforman en grandeza para nuestro espíritu.