viernes, diciembre 11, 2009

Dios

Oscurece un momento mi visión. Es mediodía y la luz se desvanece. Mis ojos cerrados y la luz apagada ayudan a buscar este momento. Lentamente el sonido cotidiano se desvance suave, lentamente. Estoy tranquilo, estoy feliz.

Nada puede detener mi búsqueda de mí. En esta quietud, siento mi respiración, con un ánimo lúdico coloreo el aire que entra en mi cuerpo y llena mis pulmones, siento su camino. Mis músculos se relajan y empiezo a no pensar. Enfoco mi atención en los pensamientos vanos que llegan y que les pido se alejen, de pronto el pensamiento es nada. El cuerpo y la mente se acomplan en uno mismo. La integración es total, absoluta. Todo es felicidad en mí.

En este momento le pido a Dios que nos siga llenando de bendiciones y el sonríe y asienta contento de este instante compartido.

Abro mis ojos, relajado, en paz y lleno de una alegría atípica, mejor que la acostumbrada. La vida es increíble, todo es maravilloso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Indescribable, intimate moment! Very nice...

Irena de O dijo...

La vida es bella estimado!!