sábado, noviembre 19, 2005

EMPRENDEDORES 2005

No hay fecha que no llegue, ni plazo que no se cumpla, así reza el refrán popular y en eso estamos, en la fecha programada, iniciando el día y a escasas 8 horas de dar la tercera llamada de la quinta edición del Torneo de Estrellas, evento organizado desde 2001 por la División Comercial Noroeste de Comisión Federal de Electricidad. En este breve recuento me siento muy satisfecho de los resultados obtenidos, viendo la evolución que se ha tenido de cinco años atrás a la fecha. Aún no da inicio el evento y ya puedo percibir la energía y la buena vibra de los participantes.

Pero, si me lo permiten, déjenme explicarles cual es mi función en este evento de CFE. Primeramente la invitación fue a producir un espectáculo completo de concurso, tipo programa de televisión. El resultado fue tan satisfactorio en el primer Torneo que el evento fue implementado. En este tiempo hemos probado varios modelos de concursos, siendo el que se utilizaá mañana un sitema muy similar al formato utilizado en el rival más débil, programa producido y transmitido por TV Azteca.

EN estos momentos nos encontramos probando el sonido y montando las escenas de luces que se utilizarán el día de mañana. El trabajo es arduo, pero siempre al culminar el Torneo exitosamente es el mejor pago que se recibe, claro también la retribución económica es de mucha importancia para mi empresa, pero la experiencia y la respuesta del público es realmente vitalizante.

Me detuve un momento en mi trabajo para compartir parte de mis horas más conflictivas y de mayor estrés.

Gracias por su atención. Saludos.

viernes, noviembre 11, 2005

Rock and roll

Al grito de ROCK AND ROLL vamos avanzando, estresado o no, eso no importa, lo realmente trascendente es que avanzamos. Y todos sabemos que no hay fecha que no llegue, ni plazo que no se cumpla. En esas estamos, a sólo una semana de casi 100 días de arduo trabajo, todo se resume a 6 horas de espectacularidad.

Sin miedo y con entusiasmo, bienvenido Congreso Emprendedores 2005... y sobre todo bienvenido Torneo de Estrellas V Edición.

miércoles, noviembre 09, 2005

Personalidad bipolar

Ahora me acusan de bipolar (antes voluble). Me dicen que la gente a mi alrededor debe de aprender a entenderme, a aceptar mis "súbitos" cambios de personalidad. Esta bien, aún no conozco a alguien que sea siempre de la misma forma, quizás sea más tangible en mi, por la gente que me rodea, que me tolera. Aunque pensaba que el cambio en mi cabeza no se notaba, ahora me doy cuenta que no es así. A todos les pido un poco de empatía, esto es momentaneo, son sólo unos días, espero. Quisiera que fuera más seguido el que mi agenda se sature, esto me permitiría no pensar tanto en lo que debo o no hacer, sólo me dejaría llevar por la corriente.

A todos los que quiero les envio un enorme abrazo, soy el Alberto de siempre, víctima de las presiones externas de fin de año, que sin duda me permitirá entrar a otras esferas y a recuperar mi entrañable capacidad de asombro.

Estoy bien, estoy feliz, gracias por preocuparse por mi. Recuerden mi pasión por mi trabajo y me entenderan un poco, aunque sea un poco más.

martes, noviembre 08, 2005

Hermosillo

Hoy la ciudad está diferente, sus luces ya no brillan igual, por lo menos para mi. Estoy en una sinergia tan diferente a mi, a lo que soy. Transito por las calles de mi Hermosillo y ya no me sabe igual. Ese aire pleno y libre que me llenaba, que me deleitaba, que me asombraba ya no existe. Los detalles que antes me hacían sonreír se perdieron y ni cuenta me dí. No me enteré qué cambios ocurrieron ni cuando pasó, repentinamente el tobogán de las inquietudes y el estrés me atrapó y ya no me permite salir de su torrente.

Sólo tengo la certeza de que estos cambios no son palpables por el resto de la población, la perspectiva que se proyecta está en mi cabeza y se niega sistemáticamente a abandonarla.

Algún día, espero pronto, me devuelva mi capacidad de asombro, para descubrir que mis calles, mis parques, mis edificios, mi cerro de la campana, mis atardeceres siguen siendo los mismos que me hinchan de orgullo.