Vacaciones forzadas

Hola amigos, después de algunos días de ausencia, ando de vuelta por acá, para escribir un poco y no crean que no andaba con intranquilidad, de verdad para mi es un compromiso este blog, espero que disculpen mi ausencia forzada por una enfermedad que ya me venía aquejando desde tiempo atrás y que por creerme invencible no le hice caso y ya ven, siempre se paga la factura. Estuve inhabilitado desde el jueves en la noche y aún no me recupero del todo, pero mañana cumplo treintacuatro años y quiero sentirme bien. Tres médicos dieron su diagnóstico, el primero que era un cuadro clásico de agotamiento por estrés, él cual había mermado mis defensas y me cayó una infección en el sistema digestivo (hasta ahí todo está muy bien, pero su medicina no dió resultado seguía peor) el segundo médico me dijo que era una bacteria, que era necesario hacer estudios a profundidad, la verdad cuando saque cuentas de lo que costaría, sentí una mejoría inmediata; no muy convencido de este diagnóstico le llamé a un médico amigo mío Dr. Galaz y le dije mis síntomas, por teléfono y me dijo que fuera a su consultorio y después de auscultarme a conciencia, el diagnóstico fué el mismo del primer médico, defensas bajas, infección muy grave en garganta y estómago y agotamiento. Me dijo que me dejara de tonterías (bueno el me lo dijo más en confianza) que me tomará la vida más amena, más relajadas. Prácticamente me dijo vete de vacaciones y no te preocupes. Y yo que pensé que realmente era lo que hacía, pero ya ven. Ya en una ocasión anterior les había comentado sobre los efectos del estrés y no aprendo. Definitivamente algo tengo que hacer con mi vida. ¿Y Ustedes?