Tiempo de actuar

A escasos días de que finalice el año 2009, el recuento es de resultados muy diversos. Por una parte están las negativas, la violencia, la inseguridad, las pérdidas, pero sobre todo la crisis que se agravó los últimos meses, pese a todos los esfuerzos de los sectores por minimizarla. Empresas tuvieron que hacer cierres de áreas, recortes, cambios drásticos en los movimientos financieros y ajustes en los pagos. Pero por otro lado está lo aprovechable, la ferrea voluntad de los mexicanos, el coraje para salir adelante y las áreas de oportunidad que se abren y que son infinitas.

En las personas el estrés provocó defensas bajas y un ambiente propicio para enfermedades respiratorias y del sistema nervioso, llegando en muchos de los casos a sacar de la jugada a muchos por varios días. El ánimo se convierte en desánimo en muchas de las ocasiones y no queda otra más que tomar aire y continuar, buscando soluciones creativas. Es en este punto donde quiero detenerme en un breve análisis. Hemos escuchado en algunas ocasiones que las crisis son sinónimo de oportunidad, mientras unos lloran siempre habrá alguien que venda los pañuelos. Esto es algo que debemos de considerar, veamos. Cuando encontramos una solución a un problema nos sentimos básicamente bien, esto es porque nuestra educación está basada en el reconocimiento y la recompensa. Estos pequeños triunfos diarios, nos alientan a continuar. Caso contrario cuando no es posible resolver algo llega la frustración. Obviamente preferimos el éxito al fracaso. ¿Cómo hacer para que los éxitos sean mayores a los fracasos? Es en este punto donde entra la creatividad.


La creatividad debemos de hacerla parte de nuestra cotidianidad. El intentar cosas nuevas, escarbando en lo más profundo de nuestras ideas para encontrar esa novedad que hará que las cosas funcionen es la clave. El ser creativo, nos permite ser mejores, diferentes, no dejar opciones fuera de la jugada, todo se vale. De las ideas más locas han surgido los inventos más revolucionadores de la historia. Ahora, no se trata de encontrar el hilo negro o bien, hacer un invento increíble que nos ponga en la historia del mundo (aunque sería algo genial). Se trata de aplicar la creatividad en todo lo que hacemos. Desde el momento que nos levantamos, como aprovechar mejor nuestro tiempo, el orden de las cosas, nuestro trabajo, como podemos ser más eficientes, como podemos hacer más y mejor las cosas con menos esfuerzo, hay tanto por hacer. En la medida que vayamos integrando cambios creativos, inteligentes y sistemáticos en nuestros procesos, en nuestra vida, ésta empezará a mejorar.

El inicio de un nuevo año siempre es un buen pretexto para iniciar con cambios en las rutinas. Los propósitos deben de ser realistas, pero sobre todo que nos muevan hacia el entusiasmo. Estoy convencido que conforme hagamos las cosas con el enfoque adecuado para cada persona, las cosas van a fluir maravillosamente.

Es tiempo de hacer que las cosas pasen. Todo es posible. Esperemos el año, como lo que es, un reto grandioso que nos da la oportunidad de demostrar que somos grandes. Que podemos con lo que se nos ponga enfrente, nada nos va a detener.

¡Aquí te esperamos 2010!