Princesa del cuento

Miro tu imagen difusa, con tus desenfoques acostumbrados,
en la vertiginosidad y el estrépito que es mi cotidianidad,
te conviertes en oasis voluptuoso de un mundo fantástico,
un lugar habitado por hadas y princesas encantadas,
y he visto infinidad de veces tu mirada sin conocer tus ojos,
así como el sonido acariciante de tu sonrisa sin ver tus labios.

Eres una belleza completa de siluetas de luz y contraluz,
que aprehendo instantánea y con un parasiempre de color,
en ti el tiempo camina en un slow motion interminable
No me queda más remedio que aceptar tus palabras
como el único consuelo viable para acercarme a tu calor,
No, no quiero seguir sufriendo el vivir sin la certeza
de que jamás podré mirar de frente tu alma y tu vibra.
Hoy renuncio a ello y te vivo y te siento y te idolatro
a través de las pequeñas letras que te forman y delinean,
esas que hacen que de alguna extraña manera seas tangible.

Hola mi princesa del cuento de hadas, gracias por estar.